El yoga es una actividad física muy recomendable para personas de la tercera edad por sus beneficios físicos y psicológicos.
Con la práctica regular del yoga se pueden corregir muchos de los problemas asociados con la edad como son el insomnio, la circulación insuficiente y problemas digestivos.
También ayuda a estimular la flexibilidad muscular y corregir la postura ayudando a mejorar el estado físico.